Raimundo Estivill Inglés

Su historia

Raimundo Estivill Inglés Nació el 7 de diciembre de 1914 en Cornudella de Montsant, Tarragona.
Deportado a Mauthausen el 22 de enero de 1942. Nº de prisionero 3.093.
Liberado el 5 de mayo de 1945. Falleció en Francia

Texto y fotografías facilitadas por su hijo Jean Estivill.

Mi padre, desde muy joven, simpatizaba con la izquierda republicana. Fue militante del POUM (Partido Obrero de Unificación Marxista) y de la CNT (Confederación Nacional del Trabajo). Integrante del comité antifascista, ingresó en el Ejército republicano, donde había menos peligro político para los del POUM (ya habían asesinado a su dirigente Andreu Nin). Estuvo destinado en transmisiones. En 1938 se encontraba en el frente con José Cabrero Arnal, que también sería deportado a Mauthausen y tras la Segunda Guerra Mundial se convertiría en un caricaturista famoso, conocido por su célebre personaje, el perro Pif, cuyas historias publicó en el periódico comunista L'Humanité.

Raimundo pasó la frontera francesa hacia Prats de Molló en febrero de 1939 y estuvo en el campo donde se encontraba buena parte de los exiliados catalanes, Agde. Cuando Francia declaró la guerra a Alemania ingresó en una Compañía de Trabajadores que fue destinada a los Alpes Marítimos. Formando parte del Ejército francés, fue apresado por las tropas nazis en Saint-Quentin (Aisne) en junio de 1940 y enviado al frontstalag situado en Laon. Mi padre contaba que el oficial francés de su compañía siempre se burlaba del grupo de republicanos y les llamaba "soldados del ejército en derrota" (palabras de un poema de Víctor Hugo). Cuando fueron detenidos y recluidos como prisioneros de guerra, los españoles le recordaban: "Capitán, ahora somos todos soldados del ejército en derrota".

Raimundo Estivill Inglés

Más tarde los caminos se separaron con el acuerdo Hitler-Pétain-Franco, ya que los españoles fueron enviados a campos de concentración mientras que los franceses capturados junto a los españoles permanecieron en los campos de prisioneros de guerra.

En enero de 1942 fue enviado a Mauthausen. Allí fue destinado al kommando Steyr y a primeros de 1945 a Gusen.

En el campo fue ayudado muchas veces por José Borrás, ya que trabajaba como intérprete, y al tener un oficio privilegiado tenía la posibilidad de conseguir un poco más de comida. Borrás escribió un libro después de la deportación titulado Histoire de Mauthausen. Les cinq années de déportation des républicains espagnols.

Cuando liberaron el campo, en mayo de 1945, mi padre tenía el tifus. Los americanos veían impotentes todo lo que había ocurrido y estaban desbordados por el elevado número de enfermos. Los deportados tuvieron que apañarse ellos mismos. Otros dos compañeros se encontraban en la misma situación, Antonio Borau e Inocencio Arbúes. Trabaron una gran amistad que perduró durante años tras su establecimiento cerca de París. Ambos fueron sus testigos en su matrimonio, celebrado en 1946, con una española emigrada a Francia.

Al perder a su madre se atrevió a ir a España para visitar a su padre en 1958, aunque creía que la nacionalidad francesa no suponía una seguridad suficiente frente a posibles represalias. Su vida dependía de una denuncia, pero fue acogido con los brazos abiertos por los caciques locales. La razón fue que durante la guerra, con el "comité", dio una orden tajante: "Aquí no se matará a nadie, cada caso será juzgado". Los afines a la sublevación golpista fueron confinados en el barco-cárcel que había en Tarragona. Esta actitud no fue correspondida al final de la guerra; los franquistas mataron, en 1940, al padre del que fue el primer alcalde de la democracia en Cornudella de Montsant, Álvaro Busquet Estivill.

Con la colaboración de l'Amicale française de Mauthausen